La campaña agrícola 2022/23 viene transcurriendo bajo un escenario climático adverso, que podría tener impactos significativos sobre la producción y las empresas agropecuarias en las distintas provincias del país. La falta de precipitaciones, las bajas reservas hídricas, y los pronósticos climáticos con lluvias limitadas para los próximos meses aumentan la posibilidad de enfrentarnos a una de las peores sequías de las últimas décadas.